Andrés, como buen delantero, es un depredador del área. Este madrileño llegó del Getafe a la cantera blanca en 2012 y comenzó su andadura en La Fábrica en el Cadete B. Se caracteriza por su olfato goleador y por su habilidad en las distancias cortas, en las que no suele fallar. Su velocidad es otra de sus mejores armas.