Mundial 82

La organización en España del Mundial de fútbol de 1982 obligó a una remodelación general del Santiago Bernabéu, estadio designado para albergar una de las fases de clasificación y la final. Era importante transmitir una imagen de modernidad a los millones de personas que seguirían el campeonato en directo o a través de la televisión. Por eso el proyecto de reformas afectó a la práctica totalidad del recinto.

El aforo se redujo a 98.776 localidades, 67.000 de ellas de pie. Se aumentó la potencia del sistema de iluminación y se incorporaron nuevos videomarcadores fabricados con la última tecnología. De las novedades incorporadas al Bernabéu la más llamativa fue la cubierta. Se instaló una marquesina de estructura metálica que cubría tres cuartas partes de las gradas. Gracias a ella un buen número de localidades quedaron a resguardo de las inclemencias del tiempo..

Un estadio moderno que ha continuado adaptándose a las necesidades de cada momento para convertise en Estadio de élite