Pleno de triunfos del líder en Atenas
Panathinaikos
FinalizadoReal Madrid
El Madrid se impuso a domicilio al Panathinaikos en un partido muy físico y tras un gran tercer cuarto. Hezonja lideró a los nuestros (19 puntos) junto a Deck (16) y Musa (14).
El Real Madrid pasó y con nota la exigente doble jornada de la Euroliga en Atenas. Tras vencer al Olympiacos hace 48 horas, el líder volvió a demostrar su poderío físico y mental, y sumó un nuevo triunfo en la capital griega. Esta vez frente a Panathinaikos. Los de Chus Mateo dieron una lección magistral de superación y coraje en una de las canchas más complicadas de Europa. Firmó un espectacular tercer cuarto (10-26) que le permitió llevarse la victoria. Hezonja (19 puntos), Deck (16 y 5 rebotes) y Musa (14) dieron un recital para guiar a los nuestros hacia la victoria.
Se esperaba un encuentro vibrante en el OAKA Arena y así fue. No se le notó el cansancio en el inicio al Madrid, que llevó la iniciativa gracias a un juego basado en buscar a Tavares en el poste bajo. Ahí llegó el 4-9 en el minuto 4. Pero a partir de ese momento, el Panathinaikos apretó el acelerador y se mostró más agresivo en defensa. Mitoglou y Nunn, desde el perímetro, fueron los encargados de igualar la balanza, pero los de Chus Mateo aguantaron el envite. El rebote defensivo, y un Deck muy acertado en el triple (2 seguidos) junto a Hezonja, permitieron que nuestro equipo se llevase el primer cuarto (23-24).
Ritmo frenético
El partido se jugaba a un alto voltaje. Los locales imprimieron mayor velocidad, pero fue inútil. Se toparon con un muro y el posterior vendaval madridista desde el triple (50% de acierto). Llull, que acababa de salir a cancha, dio alas a su equipo con dos triples consecutivos junto a Hezonja y Campazzo, el cual puso la máxima diferencia (26-35, min. 13). Lo paró Ataman y el Panathinaikos cambió radicalmente de cara. Nutridos de las pérdidas visitantes, con Lessort y Nunn (con 17 puntos) eléctricos, los griegos dieron la vuelta al marcador con un 17-2 de parcial. No obstante, los nuestros consiguieron contrarrestar la dinámica rival gracias a Tavares, Campazzo y un triple de Hezonja casi al final de un segundo cuarto igualadísimo (45-46).
Cambió el ritmo, pero no el esfuerzo físico. Cada balón, rebote y recuperación eran una pelea tremenda. Parecía que la defensa del Panathinaikos no daba opción, pero el Real Madrid fue encontrando poco a poco fisuras. Deck y Tavares (9 rebotes), debajo del aro, y Musa enchufado desde el 6,75 firmaron un 0-10 a favor para hacer el 51-58 en el 26’. La cosa no quedó ahí y los nuestros rompieron el partido a través de la defensa. Los griegos no consiguieron anotar en seis minutos y encajaron un 1-17 de parcial. Musa (14 puntos) dio en Atenas un nuevo recital en el tiro junto al trabajo en los dos lados del campo de Deck (16 puntos y 5 rebotes) y Causeur.
Gestión de la renta
A pesar de la diferencia, los de Ataman salieron a firmar la heroica. Con un 8-0 de parcial en menos de tres minutos lograron rebajar la distancia (63-72). Un triple marca de la casa de Llull puso las cosas en su sitio para que el Madrid cogiera aire. La defensa férrea de Poirier en el poste bajo y las aportaciones tanto del balear como de Hezonja lograron poner el +14 a falta de cinco minutos para el final. La gestión de la renta de los minutos finales en el OAKA Arena permitió a los de Chus Mateo rubricar la 12ª victoria en la Euroliga, afianzar el liderato y superar con creces una dura doble jornada en Atenas ante el Panathinaikos y Olympiacos.