Gran victoria ante el París Basketball

El Real Madrid venció al París Basketball en su último partido del año en casa en la Euroliga. Un encuentro eléctrico y de ataques, que acabaron llevándose los de Scariolo con una sólida defensa en el último cuarto. Fue soberbia la actuación de Maledon; el autor del punto un millón en la historia del torneo (21 puntos y 27 de valoración en 23 minutos) estuvo respaldado por Tavares (16, 4 tapones y 22), Lyles (10 de sus 14 puntos en el tramo final) y un gran trabajo colectivo.

Arrancó con mucha concentración el Real Madrid, controlando el rebote defensivo y con la figura de Tavares siendo imprescindible (6 puntos y 3 rebotes) para que los franceses dudaran finalizar sus acciones, ralentizando el ritmo endiablado del Paris Basketball. Campazzo (5 puntos) y Abalde, con sendos triples, lideraban un ataque muy fluido en los primeros 5 minutos (14-9). Pero ante este rival no puedes bajar la guardia. Su juego ultra veloz, de llegar y tirar, le salió bien y, tras tres triples consecutivos, se pusieron 5 arriba. Maledon volvió a conectar a los suyos, liderando un 8-0, incluida la canasta que superaba el millón de puntos en la Euroliga, en el segundo 43, para acabar ganando el primero cuarto por 24-21.

Ritmo frenético
El segundo cuarto fue aún de mayor actividad ofensiva. Cuando el Madrid tuvo un buen balance defensivo y cerró su rebote, le fue bien. Maledon y Deck, con sus penetraciones, mantenían a los de Scariolo encima (39-38, min.16). No era una empresa sencilla, ya que el conjunto parisino, además de acertado por fuera, lo empezaba a estar también por dentro. Frenábamos a Hifi, pero florecían Rhoden y Ouattara (25 puntos entre ambos) para retomar la delantera con el 41-48. Fue, otro gran último minuto madridista, calcando el 8-0 del primer cuarto, el que dejó el marcador con un punto de diferencia al descanso (49-50).

Los franceses siguieron a lo suyo, con posesiones cortas, porcentajes muy altos en el tiro (Herrera, Stevens y Rhoden) y cargando el rebote ofensivo (M'Baye). Así llevaron la iniciativa durante el tercer cuarto, ante un Madrid que hizo un ejercicio mental para no desesperarse y seguir su estela, aun con esa propuesta parisina de ida y vuelta y una total desorganización. Tavares y Okeke sustentaron a los locales, que minimizaron la inspiración visitante antes de entrar en la recta final (70-74, min.30).

Victoria desde la defensa
Parecía impensable por cómo se había desarrollado el partido, pero tenía que ser así. Ante los parisinos no se pueden intercambiar canastas. Lo había hecho el Real Madrid hasta ese momento, sin embargo, necesitaba dar un paso adelante en defensa. Y lo hizo. Tras un arranque de último cuarto con dos triples por bando, y un 76-80, los nuestros sacaron su carácter ganador, esa lucha incesante hasta el final, que propició la remontada. Dejó en 16 puntos a su rival cuando había metido 21, 24 y 29.

Todos se conjuraron para sacar el encuentro adelante, y todos fueron importantes: Campazzo y sus 4 robos, el último a Hifi a falta de 25 segundos; Garuba y su impresionante derroche en los dos lados (6 puntos); la mano de Lyles; la intimidación de Tavares (4 tapones), o el trabajo a la sombra de Deck y Okeke. Mención especial a Maledon. El base madridista dio una lección de baloncesto en este periodo con su lectura de juego y sus penetraciones. Una de ellas, con 92-90, terminó en un canastón, a falta de 9 segundos, que sentenció el encuentro y dio un triunfo muy bien trabajado para el Real Madrid (95-90, min.40).

Estadísticas del Real Madrid-París Basketball