El líder de la Euroliga sigue intratable en el WiZink Center
Real Madrid
FinalizadoValencia Basket
El Real Madrid vence al Valencia Basket en la prórroga y suma su 10ª victoria seguida en su cancha; la leyenda Sergio Llull, decisivo en el día de su homenaje junto a Campazzo y Tavares.
El Real Madrid avanza con firmeza en la Euroliga. Menos de 48 horas después de ganar en la cancha del Bayern de Múnich, hizo lo propio ante el Valencia Basket en el WiZink Center en la quinta doble jornada europea que completa con pleno de triunfos. Los de Chus Mateo ratificaron su condición de invictos en casa, aunque tuvieron que sufrir para llevarse el partido en la prórroga después de remontarlo en la segunda parte. Décima victoria consecutiva para igualar el tercer mejor arranque de su historia en casa. En total, son ya 19 triunfos en 21 partidos del líder indiscutible de la competición. Un día redondo en el que nuestro capitán, Sergio Llull, además de ser uno de los más destacados (16 puntos con 4 triples), recibió un homenaje por su récord de partidos como madridista. Alocén se hizo centenario con nuestra camiseta. Enorme actuación de Tavares (18 puntos, 19 rebotes, nuevo récord personal, y 32 de valoración) y de Campazzo (19 puntos, 7 asistencias y 28 de valoración).
El homenaje a Llull dio paso a un primer cuarto en el que nos costó entrar en juego. Fuimos a remolque ante un Valencia Basket que impuso su fuerte defensa y contuvo nuestro ataque. Sus cuatro triples y la anotación de Jones y Davies (15 puntos entre ambos), les permitió coger hasta 10 puntos de ventaja con el 11-21. Tavares, con cuatro puntos y cuatro rebotes, fue el mejor de los locales en estos minutos iniciales (16-24, min.10).
Reacción del líder
El Madrid no conseguía cambiar la dinámica del partido. Su falta de acierto en el triple le impedía sumar con regularidad. Por el contrario, el Valencia Basket sí encontraba la aportación del banquillo, esta vez con Jovic y Pradilla al frente. Sin Poirier, que no se vistió hoy, Tavares y Ndiaye conformaban la dupla de pívots. El canterano aportó energía y el de Cabo Verde se fajó cerca del aro para ser el referente de los nuestros (10 puntos y 7 rebotes al descanso). Con 11 puntos abajo en el ecuador del segundo tiempo, el líder comenzó a mostrar su verdadero nivel en defensa. Pronto hizo efecto y frenó la anotación de los taronjas, a los que dejaron en dos puntos en los siguientes cuatro minutos para un parcial de 10-2 a nuestro favor con Llull y Musa sumándose al ataque (35-40, min.20).
El partido se reanudó tras el descanso con un cuarto de hora de retraso por un problema en el reloj de una de las canastas. Circunstancia que no descentró al Madrid, que siguió alimentando su parcial (11-3) gracias a la mejoría en el triple y a un Musa que tomó el testigo ofensivo. En 11 minutos, del 15´al 26´, le dio la vuelta al partido tras un 23 a 9 con el que nos colocamos por delante por segunda vez (46-43). Pero era un encuentro complicado, por el rival y por los continuos parones que imposibilitaban mayor ritmo en el juego. Sin embargo, los de Chus Mateo mantuvieron su agresividad atrás y la aparición de Yabusele y Campazzo, con 11 de los 13 últimos puntos del equipo, nos llevó a una ventaja de +3 al final del tercer cuarto (58-55).
Otro partido a la prórroga
El Valencia Basket estaba haciendo muy bien su partido. Entró mejor en el último cuarto, con un 15-6 a su favor entre Davies y Puerto (64-70, min.36). Otra vez tocaba remar, pero ahora con solo cuatro minutos por delante. Momento de sacar a relucir su fortaleza en equipo. Todos a una. Hezonja, con un 3+1, igualó el choque; Jones se empeñaba en tirar por tierra el esfuerzo de los nuestros. Paso al frente de Sergio Rodríguez, del increíble Llull y de Campazzo. Dos triples de estos últimos y dos tiros libres de Hezonja nos daban una ventaja de tres puntos a falta de tres segundos. A la desesperada, Harper anotó un triple inverosímil para mandar el partido a la prórroga (82-82).
Siempre hay que creer en la victoria
Esa es la máxima del Real Madrid. Una vez más lo volvió a demostrar. Se levantó del golpe con mayor fuerza y empuje. Llull agranda su leyenda en cada partido que pasa. Y van 1.048. Cinco puntos suyos, jugando cojo por un golpe recibido, abrieron la prórroga y el camino de la victoria. El equipo ya no permitió nada al Valencia Basket, al que anuló casi por completo. Pisó el acelerador en ataque, con Musa, Hezonja y un Tavares que acabó con 19 rebotes, su mejor marca de siempre. Cinco grandes minutos colectivos donde se logró un 14-4 definitivo. El capitán, homenajeado al principio, se fue ovacionado también al final (96-86, min.40). Nuevo triunfo con ADN madridista.