Supercampeones de Europa

Cualquier aficionado firmaría antes del pitido inicial de un encuentro todo lo que sucedió en el Cardiff City Stadium. El 12 de agosto el Real Madrid disputaba la final de la Supercopa de Europa tras la consecución de la Décima contra el campeón de la Europa League, el Sevilla C. F. En la tierra natal de Bale, el conjunto de Ancelotti, gracias a un inconmensurable Cristiano Ronaldo, que firmó un doblete, venció a los sevillistas, levantó la segunda Supercopa de Europa de toda su historia y demostró su supremacía a todo el continente. “Ganamos el título para los aficionados, están siempre con nosotros y es un momento especial para celebrarlo”, declaró el delantero portugués al finalizar el encuentro.

La Supercopa de Europa es de esos títulos que toda afición espera que su equipo logre para comenzar la temporada de la mejor forma. Y si fue una noche especial para todo el madridismo aún más apoteósica fue para los nuevos integrantes de la plantilla blanca. Kroos y James se estrenaron en partido oficial con la camiseta blanca. Y no pudieron empezar mejor su etapa en el club blanco. “Espero que sea el primero de muchos títulos”, sentenció el centrocampista colombiano.

Después de que Casillas levantase el ansiado trofeo y jugadores y cuerpo técnico festejaran la victoria en el césped con los aficionados blancos desplazados hasta Cardiff para apoyar al conjunto, la fiesta se desplazó hasta el vestuario. Los brindis y abrazos dieron paso a las fotografías de todos los integrantes con la Supercopa. No era para menos. Como dijo el presidente del club Florentino Pérez: “Es la historia del Real Madrid, y con esa ilusión hemos preparado esta temporada”.

El Real Madrid comenzó la temporada como finalizó la anterior: con un título europeo que ya se encuentra en el museo del club blanco para que todo el madridismo pueda disfrutar de la histórica segunda Supercopa de Europa.